Los piratas aún existen. Quizás ya no llevan patas de palo, parche en el ojo y pone cara de malo. Ahora, más bien, están armados con RPG y se han convertido en una pesadilla para la marina mercante que surca las aguas cercanas a Somalia.Autodenominados 'Guardia Costera Voluntaria de Somalia', y argumentando que se defienden de la abusiva pesca internacional, además del vertido de productos tóxicos (desde aquí no decimos que sea ni mucho menos mentira), su principal táctica consiste en el secuestro de tripulaciones para pedir posteriormente un rescate: en 2.008 se calcula que obtuvieron unos 30 milones de dólares (y algunas fuentes aseguran que 80).
Entre sus 'logros', destaca la captura del petrolero Sirius Star (el 15 de noviembre de 2008), tres veces más grande que un portaaviones, o el estadounidense Maersk Alabama (8 de abril de 2009), el primer abordaje a un navío con bandera yanki por piratas en dos siglos.
En España tenemos el famoso caso del atunero Alakrana: 36 trabajadores fueron capturados.
Para intentar evitar estos ataques, el 2 de junio de 2008, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, a petición del Gobierno Transicional de Somalia, aceptó de forma unánime el poder entrar en las aguas territoriales con el fin de evitar la piratería.
La Task Force 150 es la encargada de velar por la seguridad en dicha zona, compuesta principalmente por buques de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Dinamarca, Pakistán y la República de Korea, con la colaboración también de Australia, Italia, Holanda, Nueva Zelanda, Portugal, Singapur, Turquía y España.
A pesar de la aparente falta de organización de los piratas, parece ser que existe cierto orden, regido (según declaraciones de piratas capturados) por un concejo oculto en las montañas de Eyl. Incluso tienen cierto 'código' de honor, ya que tienen prohibido hacer daño a cualquier rehén e incluso efectuar cualquier hurto a bordo de la nave (hay que recordar que el fin del abordaje es el pedir rescate).
Pese a la presencia de la flota 'combinada' en la zona, los asaltos se siguen produciendo.
Fuente e imagen: Wikipedia.
Imagen: http://nauticajonkepa.files
Y lo que queda ya que la situación en Somalia es poco menos que insostenible y los que andan en el fregao de la piratería tienen una magnífica fuente de ingresos para solucionar estos tiempos de crisis en los que andamos. Ahora más en serio, el tema de la piratería en esa zona es muy complicado y, aunque velar por la seguridad en la zona es una de las cosas que hay que hacer la principal para acabar con este conflicto es ayudar a Somalia a salir de la situación en la que se encuentra.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, aunque me temo que ese mismo razonamiento se puede aplicar a casi todos los países del continente africano. Los estados fallidos son siempre un foco de inseguridad, pero a muchos les conviene el mantenerlo así. De todas formas es curioso que los rescates los negocien representantes en Londres y no en una oscura cala de la costa somalí. Hay muchos intereses ocultos en este mundo globalizado. Y lanzo la pregunta: ¿Que pasaría si Irán, con su salto al vacío nuclear, se convierte en un enorme estado fallido con capacidad para bloquear el estrecho de Ormuz y con ello el suministro de petróleo a la sedienta europa? El índico es un polvorín, y la intervención armada es sólo un tratamiento paliativo.
ResponderEliminarUn saludo.